Exlíder de la UJC es detenido por fraude migratorio tras regresar de Cuba a EEUU
Fue detenido en el aeropuerto de Miami, y permanece a la espera de una audiencia ante un juez de inmigración
Yuniel Báez Pedrera, ex primer secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) en La Habana, fue detenido por agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos al llegar al aeropuerto de Miami después de un reciente viaje a Cuba.
De acuerdo con Martí Noticias, el exdirigente cubano enfrenta un proceso por presunto fraude migratorio tras obtener la residencia permanente en el país bajo alegaciones de persecución política.
Estas alegaciones están siendo cuestionadas por los oficiales debido a su historial como alto funcionario del régimen comunista cubano y sus viajes a la Isla.
Báez, quien fue una figura prominente en el aparato político cubano por más de una década, permanece recluido en el centro de detención de Krome, en el condado de Miami-Dade, a la espera de una audiencia ante un juez de inmigración que podría resultar en su deportación a Cuba.
Durante su tiempo en la Isla, Báez defendió públicamente al gobierno cubano y su ideología en medios estatales y actos oficiales, e incluso llegó a afirmar en 2013 que los jóvenes se incorporaban “más al proceso revolucionario”.
Una trayectoria política cuestionada
Báez, de 46 años, ocupó el cargo de primer secretario de la UJC en La Habana, un puesto estrechamente vinculado al Partido Comunista de Cuba. Sin embargo, en 2022, tras abandonar su puesto en la Isla, alegó temor creíble y solicitó refugio político en Estados Unidos, alegando persecución por parte del régimen cubano.
Pocos meses después de su entrada al país, recibió la residencia permanente, lo que le permitió establecerse en Gainesville, Florida, junto a su familia. No obstante, su comportamiento posterior ha levantado sospechas entre la comunidad del exilio cubano.
En 2024, Báez fundó junto a su esposa una empresa dedicada a los envíos de paquetes, venta de boletos de avión y otros servicios dirigidos a la diáspora cubana. A pesar de su aparente integración en el exilio, su pasado comunista y las contradicciones en sus declaraciones durante los interrogatorios migratorios han llamado la atención de las autoridades.
Borró su pasado
La comunidad cubana en el exilio comenzó a cuestionar la veracidad de sus alegaciones de persecución política. A medida que su perfil empresarial ganó visibilidad en las redes sociales, los intentos de contacto por parte de medios del exilio fueron infructuosos.
De hecho, los números de teléfono vinculados a la empresa fueron desconectados, y pronto, todos los rastros digitales de Báez fueron eliminados, incluyendo perfiles y fotos asociadas a su militancia en la UJC.
Este patrón de eliminación de referencias al pasado político es común entre exfuncionarios del régimen que buscan acogerse a la Ley de Ajuste Cubano sin tener que rendir cuentas por su involucramiento en la maquinaria de poder comunista.
El abogado de inmigración Ismael Labrador subrayó que la Ley de Ajuste exige que los solicitantes proporcionen información veraz, y que la pertenencia a organizaciones como el Partido Comunista de Cuba puede hacer que una persona sea inadmisible para la residencia, a menos que obtenga un perdón migratorio tras demostrar que su membresía fue forzada.



