ESTADOS UNIDOS

ICE detiene a anciano estadounidense de 67 años y le rompe las costillas

Los agentes lo arrastraron fuera de su auto, en medio del terror de los niños durante un festival de Halloween, creyeron que era inmigrante

Un anciano ciudadano estadounidense de 67 años resultó gravemente lesionado durante un operativo de detención realizado por agentes de ICE en Chicago, informó su club de corredores.

Según el testimonio, los agentes lo sacaron de su automóvil, lo derribaron al suelo y se arrodillaron sobre él, provocándole la fractura de seis costillas y una hemorragia interna, mientras niños disfrazados de Halloween observaban la escena.

El incidente ocurrió el sábado en el barrio Old Irving Park, en medio de una redada del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en el vecindario.

Este caso ocurre en un contexto de intensificación de las políticas migratorias de la administración de Donald Trump, que ha promovido arrestos masivos de inmigrantes latinos y deportaciones inmediatas.

Según reportes de Amnesty International, se ha documentado que “la gente muere bajo custodia de ICE”, frase pronunciada por un alto funcionario al restar importancia a los decesos de migrantes detenidos.

Más del 95 % de los internos en ciertos centros de detención son latinos, lo que evidencia un criterio de persecución racial, indicó Diario AS.

El episodio del hombre de 67 años, aunque él declaró no haber ofrecido resistencia, fue presentado por sus compañeros como “uno de nuestros atletas regresaba a casa… cuando los agentes lo sacaron del vehículo, se arrodillaron sobre su espalda y lo inmovilizaron”.

“Esto está ocurriendo en nuestro país con una frecuencia alarmante. Es terrible y tiene que parar”, indicó el club en sus redes sociales.

Mientras tanto, la administración estadounidense mantiene que sus operativos se dirigen a “los peores criminales inmigrantes ilegales”, pero activistas latinoamericanos señalan que muchos de los detenidos llevan tiempo residiendo en EEUU, con empleo formal o sin antecedentes penales, lo que demuestra una aplicación arbitraria de la ley.

Las múltiples denuncias de maltrato incluyen casos de lesiones graves y muertes bajo custodia. Un cubano de 75 años falleció en junio bajo custodia de ICE y el organismo sólo respondió con que “la gente muere en las cárceles todo el tiempo”.

Este tipo de declaraciones han sido calificadas como confesiones de negligencia institucional. Los críticos argumentan que el gobierno de Trump ha convertido el sistema migratorio en una herramienta punitiva que afecta desproporcionadamente a latinos.

Asimismo, la impunidad de los agentes, que también fueron denunciados por romper la pierna de una cubana durante su detención, refuerza una cultura de violencia institucional.

Mientras tanto, este nuevo caso en Chicago se suma al registro creciente de abusos. La detención violenta del anciano, que además contaba con ciudadanía del país, ni siquiera era inmigrante, plantea interrogantes sobre el uso excesivo de la fuerza, la protección de ciudadanos estadounidenses latinos confundidos por los agentes y la transparencia de los procesos migratorios bajo la administración actual.

 

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