Joven padre cubano deportado a La Habana: fue separado de su hija
Además de su esposa e hija, el joven también asumía la responsabilidad de cuidar a un hijo mayor de su esposa, quien enfrenta dificultades físicas
Un joven padre cubano residente en North Miami, identificado como Alían Méndez Aguilar, de 28 años de edad, fue deportado por las autoridades estadounidenses, siendo separado de su esposa y de su hija de solo tres años.
La situación ha puesto en evidencia las dificultades que enfrentan muchos migrantes cubanos en Estados Unidos durante la actual administración de Donald J. Trump, quien se ha comprometido a realizar la mayor campaña de deportaciones masivas en la historia del país.
El joven fue expulsado del país el pasado 24 de abril, sin haber cometido otro “delito” que el de cruzar la frontera y portar un formulario I-220B. Este formulario es un documento que se emite a los inmigrantes que, aunque no tienen un estatus legal, aún están en proceso de una resolución migratoria.
A pesar de su conducta ejemplar y su solicitud de asilo político, la petición de Méndez fue rechazada. Según datos obtenidos por el medio independiente Periódico Cubano, solo el 13% de los casos de asilo en Florida se resuelven favorablemente.
El periodista de Univisión, Javier Díaz, visitó la casa de Méndez y reportó que, además de su esposa e hija, el cubano también asumía la responsabilidad del cuidado de un hijo mayor de su esposa, quien enfrenta dificultades físicas y mentales.
Méndez llegó a EEUU en busca de un futuro mejor, huyendo del régimen cubano. A pesar de que desde 2020 ya tenía una orden de deportación firmada, esta no fue ejecutada debido a la negativa del gobierno cubano de aceptarlo nuevamente en el país. Finalmente, el 24 de abril, los agentes de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) lograron incluirlo en un vuelo de deportación hacia La Habana.
El joven cubano, al sentirse desbordado por la situación, expresó en un mensaje grabado para Univisión su angustia y su desesperación por la falta de apoyo legal.
“Necesito asesoramiento, qué debo hacer. Me han dicho que necesito dos perdones, uno por la deportación y otro por el tiempo ilegal que viví en EEUU”, explicó.
El único recurso legal que le queda a Méndez es comenzar un proceso de indulto, que según los expertos en inmigración podría demorar entre cinco y diez años, dependiendo de la decisión de las autoridades migratorias.
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Caso de la madre Heydi Sánchez
Otro caso que ha generado controversia es el de Heydi Sánchez, una madre cubana que fue separada de su hija de un año debido a su deportación. Sánchez llegó a Estados Unidos en 2019, buscando una vida mejor para ella y su familia. Se casó con un ciudadano estadounidense y formó una familia, pero al entrar al país, recibió un formulario I-220B.
Una abogada de inmigración ha señalado que las autoridades no tomaron en cuenta los aspectos humanos de la situación de Sánchez, quien ahora enfrenta la difícil tarea de reunirse nuevamente con su hija. La complejidad de los casos de deportación a Cuba, debido al contexto político y social, ha dificultado aún más su resolución.
La congresista María Elvira Salazar ha mostrado su preocupación por estos casos y ha instado a que se revise la situación de los inmigrantes cubanos. En su intervención, propuso que se busque una solución para permitir la reunificación familiar, enfatizando la importancia de considerar los factores humanos en la aplicación de las políticas migratorias.
