La situación en Songo la Maya es difícil por casos de fiebre de Oropouche
Las condiciones en las que se encuentra la región impiden que se pueda hacer algo efectivo para frenar el avance de la enfermedad
El municipio de Songo la Maya, en la provincia de Santiago de Cuba, se encuentra atravesando por una difícil situación epidemiológica, esto debido a la aparición de más casos relacionados con el virus de Oropouche.
De acuerdo con el medio Radio Martí, el doctor Roberto Serrano aseguró que cada vez son más los casos de esta enfermedad, cuyo vector es el jején Culex quinquefasciatus, y que las condiciones en la provincia no se prestan para lidiar con esto.
El galeno denunció que las condiciones higiénico-sanitarias en la región no ayudan a frenar la expansión del virus, y que los residentes se ven afectados por la falta de recursos esenciales como insecticidas y medicamentos.
Otras fuentes indicaron al medio de prensa que, cuando se logra detectar un caso, es demasiado tarde, y el resto del barrio comienza a presentar brotes de la enfermedad. Ahora, los residentes se enfrentan a un ambiente de miedo y paranoia, pues temen verse afectados por el virus en medio de esta escasez.
Es importante recordar que la enfermedad fue denunciada por medios independientes a mediados del mes pasado, pero fue hasta que la noticia cobró fuerza que las autoridades sanitarias de la región decidieron pronunciarse al respecto.
El Ministerio de Salud Pública de Cuba (Minsap) confirmó la presencia de esta enfermedad en la Isla, instando al pueblo a tomar medidas preventivas como el uso de mosquiteros, eliminación de criaderos de mosquitos y aplicación de repelentes.
Los síntomas de la enfermedad incluyen fiebre alta, dolor de cabeza intenso, dolores musculares y articulares, vómitos y diarrea, muchos de los cuales podrían confundirse con dengue, algo que ha complicado la situación.
Tras reconocer la presencia de esta enfermedad, los medios castristas utilizaron al doctor Francisco Durán García, director de epidemiología del Minsap, para señalar que otros casos también habían sido detectados en Cienfuegos, dejando en evidencia que la enfermedad se estaba expandiendo.
Durante aquella ocasión, Durán recalcó la importancia de la participación comunitaria en la lucha contra el vector, esto posiblemente debido a que la escasez de combustible evitaba que las autoridades pudieran hacer algo para ayudar, como pasó con el dengue durante la falta de hidrocarburos de los últimos años.
