Un preso político que fue detenido por haber participado en las manifestaciones populares del pasado 11 de julio en La Güinera, La Habana, ha permanecido en la cárcel Combinado del Este sin recibir los medicamentos que necesita.
De acuerdo con el medio independiente CubaNet, Frandy González León denunció desde prisión que fue arrestado el 14 de julio y no ha recibido atención médica desde entonces.
El citado medio señaló que González es epiléptico y necesita tomar Carbamazepina y Fenobarbital, pero hasta el momento de su última llamada no había recibido ninguno de estos fármacos.
El reo participó en las protestas pacíficas durante el 12 de julio en La Güinera, vecindario de Arroyo Naranjo, junto a varios miembros de su familia.
La denuncia de González asegura que él y varios otros prisioneros fueron trasladados al tercer piso del ala sur del edificio dos de la cárcel el pasado 26 de octubre. Día en que los reos no recibieron alimento ni colchones antes de dormir.
Durante su llamada con el citado medio, González aseguró que las autoridades penitenciarias advirtieron a todos los manifestantes arrestados que sus juicios comenzarían a celebrarse a inicios de noviembre.
Asegura además que recibieron una petición fiscal colectiva de al menos 20 años cárcel para cada uno por el supuesto delito de “sedición”.
Como a González, las autoridades penitenciarias han negado atención médica a varios de sus prisioneros, como es el caso de Jonathan Torres Farrat, un menor de edad que fue arrestado durante el 11J y padece de otitis.
“La madre de Jonathan escribe preocupada y desesperada (con dolor) porque su niño está con otitis. En la llamada de ayer supo que no le han puesto tratamiento, tampoco se le ha aplicado ningún remedio que le alivie el dolor”, denunció hace casi un mes la activista Camila Rodríguez.
La madre del joven denunció que ha llevado los medicamentos que su hijo requiere personalmente al centro penitenciario, pero las autoridades se rehúsan a entregárselas.
La mujer se mostró indignada porque mientras los guardias se niegan a entregarle lo medicamentos, le dieron una copia del libro “La contraofensiva estratégica”, de Fidel Castro, para que este lea durante su tiempo en prisión.
