Supendieron los safaris en el parque Zoológico Nacional de Cuba por falta de gasolina
El zoológico afirmó que trabajaría para solucionar el problema, pero no han mencionado nada al respecto en más de una semana
La crisis económica que azota al país, misma que ha sido reconocida por las autoridades castristas, continúa generando una escasez muy marcada de combustible, lo que llevó a las autoridades de La Habana a suspender los paseos de Safari del parque Zoológico Nacional de Cuba, uno de sus mayores atractivos.
Un comunicado que pasó desapercibido fue compartido la semana pasada, señalando que dichos paseos habían sido suspendidos desde el 4 de octubre, esto sin dar una fecha estimada de su regreso.
“Esto se debe a problemas con el suministro de petróleo que afectan directamente a nuestros vehículos para realizarlo”, se lee en la publicación, la cual explicaba que desde el nivel central, redujeron la asignación de petróleo que usa para esta actividad.
“Estamos trabajando arduamente para resolver esta situación y poder ofrecerles nuevamente esta emocionante experiencia en esos días. Les pedimos que estén atentos a nuestras redes sociales para obtener información actualizada sobre la disponibilidad del safari durante el fin de semana”, añadió el parque zoológico.
Sin embargo, este ha sido el único comunicado compartido al respecto desde hace una semana, lo que sugiere que el problema no ha sido resuelto.
Por último, el parque se disculpó con sus clientes, lamentando cualquier posible inconveniencia que la situación haya podido generar. De igual manera, solicitan a los interesados a permanecer informados a través de los canales oficiales.
Los paseos en safari son una de los principales atractivos del Zoológico Nacional de Cuba, el cual se encuentra en Calabazar, La Habana.
Este se diferencia del resto de los zoológicos de la Isla debido a que permite que los animales coexistan, siempre que su naturaleza lo permita, en comunidades, esto de manera libre de rejas o vallas.
De esta manera, los visitantes pueden agendar un viaje por el territorio de 340 hectáreas que consisten de vegetación y frondosos árboles que simulan el hábitat natural de los animales.
En este espacio, habitan alrededor de 130 especies de aves autóctonas, así como un número considerable de especies de animales exóticos y en peligro de extinción, entre los cuales se encuentran rinocerontes, avestruces, leones, leopardos, hienas, antílopes y hasta elefantes.
Los visitantes no tienen que limitarse solo a la observación de animales, pues el parque cuenta con actividades didáctico-recreativas para la familia, las cuales incluyen juegos participativos y charlas sobre los animales.
