Trump insta a la OTAN a suspender la compra de petróleo ruso

El presidente de Estados Unidos, Donald J. Trump, ha solicitado a los países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) suspender la compra de petróleo ruso como parte de sus esfuerzos por poner fin a la guerra en Ucrania.

La petición fue publicada en un mensaje de Truth Social titulado “Carta enviada por el presidente Donald J. Trump a todas las naciones de la OTAN y el Mundo”, donde además criticó la relación energética de algunos aliados de la OTAN con Rusia.

Trump subrayó que la compra de petróleo ruso por parte de ciertos países de la OTAN, como Turquía, Hungría y Eslovaquia, debilita la posición de negociación contra Moscú.

En este sentido, argumentó que la retórica de sanciones impuesta por Occidente, desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania en febrero de 2022, se ve contrarrestada por estas adquisiciones energéticas.

Trump denuncia incoherencias en la política energética de la OTAN

De acuerdo con el Centro de Investigación sobre Energía y Aire Limpio, Turquía se encuentra entre los principales compradores de crudo ruso, ocupando el tercer lugar, solo detrás de China e India.

Trump consideró que esta situación es “impactante”, pues los países de la OTAN que continúan comprando petróleo a Rusia están socavando las sanciones y medidas restrictivas que se han implementado contra Moscú.

El republicano también hizo un llamado a la OTAN para adoptar una postura más firme y coordinada, apuntando a que la falta de acción conjunta refuerza la posición de Rusia, lo que prolonga el conflicto.

“Esta no es la guerra de Trump, ¡nunca habría comenzado si yo fuera presidente!”, expresó en su mensaje.

Aseguró que, bajo su administración, el conflicto en Ucrania se habría resuelto más rápidamente, argumentando que la OTAN podría actuar de forma decisiva para salvar miles de vidas.

La situación en Ucrania

Las declaraciones de Trump se producen poco después de un masivo ataque aéreo de Rusia a Kiev, que involucró 800 drones y 13 misiles, incluidos cuatro balísticos. El ataque, que dejó cuatro muertos y decenas de heridos, también causó daños significativos en edificios gubernamentales, incluida la sede del Gabinete de Ministros.

El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, calificó el ataque como “despiadado” y denunció que era un “crimen deliberado” de Rusia para probar los límites de la tolerancia internacional. En respuesta, Zelenski pidió nuevas sanciones contra Rusia y sus aliados, pidiendo a la comunidad internacional un endurecimiento de las medidas contra el régimen de Putin.

La reunión de Trump y Putin: sin acuerdo, pero con avances

El llamado de Trump a la OTAN se da en un contexto de creciente tensión internacional. En agosto, el presidente estadounidense se reunió con el presidente ruso Vladimir Putin en la base militar de Elmendorf-Richardson, en Alaska.

Durante tres horas, ambos discutieron sobre la guerra en Ucrania y otros temas internacionales. Aunque las conversaciones se desarrollaron en un ambiente respetuoso, no se alcanzó un acuerdo de alto el fuego, y Trump reconoció que, aunque hubo “algunos avances”, aún no se había llegado a un entendimiento definitivo. “No hay acuerdo hasta que lo haya”, afirmó el mandatario.

Trump ha reiterado su postura de que la situación en Ucrania no es de su responsabilidad, pero ofreció su ayuda para lograr una resolución rápida del conflicto, que, según él, podría salvar miles de vidas.