Una fuerte turbulencia durante un vuelo de Thomas Cook que cubría la ruta desde el aeropuerto de Varadero, Cuba, al aeropuerto de Manchester en el Reino Unido, dejó a un miembro de la tripulación herido.
El hecho ocurrió a mediados de 2019, cuando el vuelo fue azotado por una turbulencia repentina, ocasionando que a una azafata se le torciera el tobillo.
Otro tripulante también sufrió varios golpes en su cuerpo.
De acuerdo con CNN, un informe de la División de Investigación de Accidentes Aéreos del Reino Unido recientemente publicado reveló que la turbulencia, que duró solo 90 segundos, causó que el pie y el tobillo de la azafata quedaran atrapados debajo de un carrito de catering.
“Su pie permaneció acuñado hasta que la turbulencia disminuyó lo suficiente como para permitir que otros miembros de la tripulación los ayudaran a liberarlos”, dice el informe.
El incidente tuvo lugar a mediados del Atlántico en agosto de 2019, mientras el avión navegaba a 37,000 pies. La turbulencia resultó en una ganancia de altitud de 500 pies y desconexión del piloto automático.
Una vez que terminó, el piloto automático se volvió a conectar y el vuelo continuó en el viaje a Manchester, donde el miembro de la tripulación herido fue al hospital a su llegada.
El avión, un Airbus A330-243, recibió daños menores en la superficie.
Thomas Cook dejó de volar en septiembre de 2019, cuando el operador turístico británico entró en liquidación obligatoria.
