La aerolínea Avianca publicó un documento en el que exponen con detalles su actual situación operativa y financiera, debido a la crisis pandémica que ha trastocado al mundo.
“Conforme informamos en nuestro reporte en Formulario 6-K de fecha 27 de marzo de 2020, hemos detenido todos los gastos de capital no esenciales y hemos diferido temporalmente los pagos de algunos de nuestros arrendamientos de largo plazo, así como también los pagos de capital sobre ciertas obligaciones de deuda.
En virtud de ello, “actualmente estamos en incumplimiento bajo algunos de nuestros contratos de financiación y otras obligaciones”, indica la aerolínea.
En el mismo texto se advierte que si las operaciones permanecen suspendidas por un periodo prolongado, “es posible que tengamos que tomar medidas adicionales para preservar nuestro negocio y proteger nuestra posición de efectivo en la medida de lo posible”.
El documento en mención, fue publicado por Avianca en virtud de algunas exigencias del mercado de valores de Estados Unidos.
“El propósito de este reporte es notificar a los inversionistas y al público en general de la imposibilidad que enfrenta Avianca para presentar oportunamente el Informe Anual en el Formato 20-F para el año fiscal con corte al 31 de diciembre de 2019 (20-F), que originalmente debía presentarse hasta el 30 de abril de 2020, debido a la situación actual con el covid-19, conocido como coronavirus”, indica la compañía.
Avianca destacó que por ser una aerolínea con operaciones en numerosas jurisdicciones, la pandemia de covid-19 ha resultado ser un desafío sin precedentes.
Desde principios de marzo de 2020, la gerencia de Avianca se ha enfocado exclusivamente en superar las complejidades sin precedente que la pandemia de COVID-19 ha creado para su negocio y sus empleados.
Avianca ya había suspendido la venta de tiquetes desde y hacia Cuba desde el pasado 31 de octubre de 2019, porque había vendido la totalidad de sus acciones a una firma norteamericana. En línea con lo anterior, la compañía también anunció que cancelaría las operaciones aéreas de los vuelos San Salvador—La Habana y Bogotá—La Habana desde el 15 de enero de 2020.
