El Gobierno cubano confirmó la existencia de cinco nuevos casos de coronavirus (Covid-19) en la Isla. Con esta nueva data se elevan a 21 las personas contagiadas con la pandemia en el país.
La información fue dada a conocer por el mandatario Miguel Díaz-Canel en una reciente emisión del programa de la televisión cubana “Mesa Redonda”, donde también estuvo acompañado del primer ministro Manuel Marrero Cruz y el vicepremier Roberto Morales Ojeda.
Actualmente, el país registra 21 casos de coronavirus. De estos, 11 son extranjeros y 10 son nacionales, residentes en la Isla o responsables de haber viajado a otros destinos en los últimos días. A la par, dentro del grupo de cubanos solo dos contrajeron la virosis luego de haber entrado en contacto con personas que arribaron al país ya enfermas.
Mientras tanto, bajo estricta vigilancia epidemiológica se encuentran 716 casos, por presentar sintomatología o proceder de territorios con altos índices de propagación. También hay otros 26 mil sujetos “controlados” en sus propias casas, sin necesidad —por ahora— de medidas más estrictas.
Medidas anunciadas por el Gobierno
Durante su intervención, Díaz-Canel, anunció un paquete de medidas para frenar la propagación del virus. Entre ellas, la prohibición de entrada de turistas extranjeros a la Isla. El objetivo, según indicó, es cortar la principal vía de transmisión de la enfermedad y concentrar los esfuerzos gubernamentales en detectar los casos que aún no han sido identificados.
A la par, hizo mención de la necesidad de distancia física entre las personas. Así como, la limitación de salidas, aglomeraciones públicas y viajes para proteger especialmente a los ancianos, el segmento de edad más vulnerable.
“Nada de besos y abrazos”, subrayó.
Los primeros casos en Cuba
El pasado miércoles, 11 de marzo, el Gobierno cubano confirmó los primeros casos de coronavirus en el país. Los pacientes eran tres turistas italianos, quienes habían arribado a la Isla dos días antes y se encontraban hospedados en un hostal de la ciudad de Trinidad, provincia de Sancti Spíritus.
Una semana después, falleció en horas de la madrugada uno de los turistas italianos, de 61 años, quien tenía antecedentes de asma bronquial y comenzó a presentar “manifestaciones clínicas de complicaciones propias de la enfermedad”.
