Banco Central de Cuba reconoce la “crítica” situación con la escasez de efectivo en sus sucursales

Alberto Quiñones, vicepresidente del Banco Central de Cuba (BCC), reconoció las dificultades que la entidad bancaria atraviesa con el efectivo, calificando de “crítica” la situación que se vive en varias de las sucursales alrededor de la Isla.

El funcionario señala que estas no disponen del efectivo suficiente para satisfacer la demanda, incluso con el límite de 5.000 pesos cubanos (CUP) que se estableció a inicios de la bancarización en Cuba.

Quiñones indicó este lunes 14 de agosto en el programa oficialista Mesa Redonda que la crisis no es consecuencia de la bancarización, pero reconoció que las tensiones con el pueblo se incrementaron a partir del anuncio hecho la semana pasada.

El funcionario señala que la gran mayoría de los ciudadanos deciden acudir al banco para extraer su efectivo, y que muy pocos realizan depósitos, y que esta falta de dinero hace que los clientes deban esperar hasta tres horas haciendo cola.

Explicó que las sucursales toman decisiones en función a la disponibilidad de efectivo con la que cuentan, por lo que algunas han establecido límites administrativos para restringir el retiro de dinero a las personas naturales.

Quiñones señala que estos límites desaparecerán a medida que haya una mejor situación en el país, aunque no dio fecha para comenzar a notar esa supuesta mejoría en la disponibilidad del dinero.

En redes sociales, los usuarios se mostraron un poco escépticos, con algunos de ellos señalando que el problema de la rampante inflación no tiene solución en la Isla, por lo que el banco debió de haberse preparado ante una caótica devaluación del CUP.

El programa oficialista no hizo mención sobre si las autoridades del BCC ya comenzaron a imprimir billetes de mayor denominación para suplir el déficit de efectivo.

Expertos, como el economista cubano Pedro Monreal, consideran que la situación ha dejado en claro que esta tampoco es la solución, pues la impresión de billetes requiere de papel moneda, tintas especiales y otras medidas de seguridad que resultan más caras que el propio dinero que terminarán imprimiendo, esto debido a la alta inflación por la que atraviesa el país.

La única opción disponible que tendrán los cubanos en los próximos días será efectuar pagos y cobros de manera electrónica, aunque el BCC ha establecido límites diarios y mensuales para estas operaciones.

Estos límites aplican solo para las personas naturales, pues las cuentas identificadas ante los bancos como “de negocios” y “empresariales” no se verán afectadas. Pese a esto, las transacciones hechas por estas cuentas quedarán registradas con el objetivo de que se paguen los impuestos que corresponden.