Covid-19 en Cuba: Multan a madre por quitarse el nasobuco para tomar helado
Una cubana, madre de dos niños, fue multada recientemente en Caimito, municipio de Artemisa, por elementos de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) tras quitarse el “nasobuco” o mascarilla para tomar un helado.
La noticia fue dada a conocer en redes sociales por la internauta Oylin Hernández Rodríguez.
“Acaban de multar a esta madre de dos niños pequeños aquí en Caimito, actual provincia de Artemisa, por bajarse el nasobuco para tomarse un helado después de varias horas en una interminable cola para comprar alimentos y así poder tener algo con que sustentar a sus hijos”, denunció la cubana en una publicación que, más tarde, fue eliminada.
De acuerdo con Hernández Rodríguez, la madre —identificada como Marisleidy Vázquez— recibió una multa de 150 pesos cubanos.
“Lo más indignante es que aplicaron un Decreto Ley que no se ajusta a la arbitrariedad que cometieron, sino es para la violación de dispositivos de seguridad”.
El Artículo 2 de la actual Carta Magna de Cuba establece la imposición de una “multa y demás medidas” en caso de ser necesario, a aquellas personas que pongan en riesgo la seguridad colectiva. Dígase, destruir, deteriorar o suprimir “dispositivos de seguridad”.
Ante tal ofensa, —detalla el inciso h de la normativa— el acusado debe abonar una tasa de 100 pesos cubanos y tendrá la obligación de “restituir, reparar o abonar el importe” de dichos elementos.
Redoble de la presencia policial
A inicios del presente mes, el primer ministro Manuel Marrero anunció el redoblamiento de la presencia policial en las calles, sobre todo, en centros comerciales y establecimientos. El objetivo —según el mandatario— es garantizar el cumplimiento de las medidas orientadas a frenar la propagación del coronavirus.
El pasado lunes, el cubano Fabián Grunet García fue arrestado en una parada del capitalino municipio Habana Vieja, tras bajarse la mascarilla para fumar. Un patrullero que vio la escena, se detuvo e interceptó al ciudadano “sin preguntarle o decirle nada”.
Ahora, Fabián — quien se encuentra recluido en el centro de procesamiento penal conocido como el Vivac— deberá someterse a un “juicio ejemplarizante”.
