La familia del prisionero político Félix Navarro, presidente del Partido por la Democracia Pedro Luis Boitel Abraham, denunciaron que el opositor se encuentra sometido a varios atropellos por parte de las autoridades castristas en la prisión de Agüica, en la provincia de Matanzas.
Su hija, la activista Saylí Navarro indicó al Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) que el pasado 15 de octubre, su padre fue cambiado de celda para que las autoridades penitenciarias pudieran revisar sus pertenencias, principalmente la libreta en la que el opositor realiza sus anotaciones.
“Lo sacaron de la celda donde lo tienen, y lo llevaron a otra celda de la penitenciaria. Lo tuvieron encerrado por espacio de 20 minutos. Transcurrido ese tiempo, se presentó el jefe de la prisión preguntándole si ya le había entregado la petición fiscal, luego dio la orden de que lo regresaran a su celda”, aseguró la activista.
Navarro dijo que su padre encontró todo revuelto, pues no se molestaron en esconder el hecho de que habían revisado sus cosas.
“Cuando llegó a su celda, encontró sus pertenencias revolcadas y la libreta de anotaciones que él tenía, le habían arrancado 18 hojas. Este fue el pretexto por el cual lo sacaron de la celda, para sacar la información que tenía escrita”, añadió.
El opositor logró mencionar durante una llamada telefónica con su hija que el pasado 30 de noviembre se llevó a cabo una requisa en su cubículo, en la que le hicieron cargar con todas sus pertenencias y cargarlas por más de 300 metros.
Saylí Navarro indicó además que los carceleros confiscaron una declaración enviada al opositor por varios Obispos, la cual le fue entregada de manera legal por su familia,
Navarro fue arrestado un día después de las manifestaciones masivas del pasado 11 de julio, cuando acudió a una estación de policía en busca de dos miembros de su partido político que se encontraban desaparecidos y ya no pudo volver a salir.
Desde entonces, su familia ha denunciado en varias ocasiones el peligro que corre debido a diversos problemas de la salud, su avanzada edad y a huelgas de hambre que ha realizado para exigir su libertad.
Como consecuencia, su hija Saylí Navarro ha sido amenazada por parte de la Seguridad del Estado, la cual le ha advertido que será llevada a prisión si continúa con las denuncias.
