Documento filtrado confirma activación de brigadas de respuesta rápida ante apagones en Artemisa
La represiva medida busca evitar una reacción social similar a las manifestaciones masivas del 11 de julio de 2021

Un documento filtrado desde el Comité Central del Partido Comunista revela medidas urgentes del régimen cubano para contener el impacto social y económico de una crisis energética agravada, con pronósticos de apagones masivos en los próximos días.
El gobernador de Artemisa, Ricardo Concepción Rodríguez, emitió una orden para la activación inmediata de grupos de trabajo temporales y brigadas de respuesta rápida en toda la provincia, siguiendo directrices del “nivel central”.
La medida busca evitar una reacción social similar a las manifestaciones masivas del 11 de julio de 2021.
El documento, compartido por el influencer Darwin Santana, detalla que estos grupos, en coordinación con el Partido Comunista, el Ministerio del Interior y la región militar, deberán evaluar diariamente la situación y aplicar acciones estratégicas para garantizar el suministro prioritario de energía, agua y combustibles a instituciones vitales.
Se estableció un servicio de guardia operativo 24 horas en puestos claves del gobierno provincial, municipios y entidades productivas.
Las brigadas, compuestas por compañías de infantería ligera y unidades logísticas, tienen la misión de proteger hospitales, panaderías y distribuidoras de gas, considerados objetivos críticos. Además, se contempla una optimización en el uso de diésel, reduciendo al mínimo su consumo y aumentando la sustitución por gasolina cuando sea posible, priorizando el transporte esencial como ambulancias y carros fúnebres.
El subgrupo de alimentos, liderado por Yoan Molina, asume la responsabilidad de la elaboración y venta de productos para la población. También se reforzó la seguridad en subestaciones eléctricas con cuadros experimentados, temiendo acciones de desestabilización que busquen el derrocamiento del régimen.
El documento insiste en mantener un flujo constante de información entre órganos represivos e informantes en barrios. Se usarán medios oficiales como televisión, radio, redes sociales y altoparlantes para mantener a la población informada, con reportes obligatorios cada tres horas sobre la situación local, confirmando nuevamente que el régimen tiene dominado el arte de la represión.