Fallece la abuela del ex presidente de Estados Unidos, Barack Obama, a los 99 años de edad en Kenia.
Sarah Ogwel Onyango Obama, de origen keniano, falleció este lunes alrededor de las 4 a.m, mientras recibía tratamiento en el hospital Jaramogi Oginga Odinga en Kisumu.
“Murió esta mañana. Estamos devastados”, expresó su hija Marsat Onyango en una llamada telefónica a The Associated Press.
Por su parte, la portavoz de la familia, Shiek Musa Ismail, indicó que Sarah que antes de ser llevada al hospital llevaba al menos una semana enferma, asimismo, aclaró que resultado negativa al Covid-19. “Mamá estaba enferma con enfermedades normales. No murió de COVID-19”.
Luego de ser informado de la muerte de su abuela, Barack Obama, expresó sus condolencias a través de un extenso post en redes sociales.
“Mi familia y yo estamos de luto por la pérdida de nuestra querida abuela, Sarah Ogwel Onyango Obama, conocida cariñosamente por muchos como “Mamá Sarah” pero conocida por nosotros como “Dani” o Granny”, escribió el exmandatario.
“Nacida en el primer cuarto del siglo pasado, en la provincia de Nyanza, a orillas del lago Victoria, no tenía una educación formal y, a la manera de su tribu, se casó con un hombre mucho mayor cuando era solo una adolescente. Pasaría el resto de su vida en el pequeño pueblo de Alego, en una pequeña casa construida con adobe y ladrillos de paja y sin electricidad ni cañerías interiores”, relata Barack.
Sarah Ogwel adoptó al padre del ex mandatario desde muy temprana edad e impulsó sus estudios para que este pudiera viajar a Estados Unidos a cursar una carrera universitaria.
“Gracias a su amor y aliento mi padre pudo desafiar las probabilidades y hacerlo lo suficientemente bien en la escuela como para obtener una beca y asistir a una universidad estadounidense”, explicó Barack.
“Cuando nuestra familia tenía dificultades, su casa era un refugio para sus hijos y nietos, y su presencia era una fuerza constante y estabilizadora. Cuando viajé por primera vez a Kenia para aprender más sobre mi herencia y mi padre, que ya había fallecido, fue Granny quien sirvió de puente hacia el pasado, y fueron sus historias las que ayudaron a llenar un vacío en mi corazón”, recordó Obama.
Asimismo, el expresidente destacó algunos hechos que marcaron la historia universal y, de los cuales, su abuela fue testigo gracias a una “extensa y extraordinaria vida”.
“Guerras mundiales, los movimientos de liberación, los alunizajes y el advenimiento de la era de las computadoras. Viviría para volar en jets, recibir visitantes de todo el mundo y ver a uno de sus nietos ser elegido para la presidencia de los Estados Unidos. Y, sin embargo, su espíritu esencial —fuerte, orgullosa, trabajadora, poco impresionada por las marcas convencionales de estatus y llena de sentido común y buen humor— nunca cambió”.
“La extrañaremos mucho, pero celebraremos con gratitud su larga y extraordinaria vida”, concluyó Obama su dedicatoria.
