Liberan al preso político cubano Ernesto Borges tras 28 años de encierro
El ahora exprisionero de 59 años fue arrestado en 1998, y pasó prácticamente la mitad de su vida en la cárcel más estricta de Cuba
El prisionero político cubano Ernesto Borges Pérez, uno de los más conocidos de las últimas décadas, fue liberado este jueves 24 de abril, luego de cumplir una condena de 28 años de encierro en el Combinado del Este, la prisión de mayor rigor en Cuba.
En entrevista con el medio independiente Radio Martí, que ha seguido de cerca su caso, Borges dio su primer pronunciamiento públoco tras recuperar la libertad.
“Me siento muy emocionado, me siento alegre y también me siento un poco extraño de estar en mi casa después de tantos años. Hoy me siento así, una mezcla de alegría con euforia, es extraño”, declaró.
El exprisionero político, de 59 años, agradeció profundamente el acompañamiento que recibió durante su prolongado encierro, pues nunca se perdió de vista su caso.
En ese sentido, reconoció el papel de la Iglesia Católica en Cuba, el Vaticano, y en particular la labor del periodista Amado Gil y el equipo de Radio Martí, que difundieron su situación.
“Gracias por no olvidarse de nosotros”, dijo.
Borges también aprovechó para enviar un mensaje de agradecimiento a los cubanos que, desde dentro y fuera de la isla, han mostrado su solidaridad con los presos políticos.
“Mi eterna gratitud para los cubanos que están sensibilizados con la realidad, que no esquivan la mirada y que asumen la realidad con valor y con dignidad”, expresó.
¿Quién es Ernesto Borges Pérez?
Borges se convirtió en preso político al ser detenido el 17 de julio de 1998, a los 32 años, cuando ostentaba el grado de capitán y se desempeñaba como analista de la Dirección de Contrainteligencia del Ministerio del Interior (MININT).
El cubano fue acusado de intentar entregar información secreta a Estados Unidos, y juzgado por espionaje en grado de tentativa. Recibió una sentencia de 30 años de prisión, una condena que él mismo calificó como “excesiva”.
“Realmente mi delito fue un espionaje en grado de tentativa, y me condenaron a 30 años como si me hubieran pedido una pena de muerte y me la hubieran conmutado”, declaró sobre su encarcelamiento.
Durante casi tres décadas en prisión, su caso fue denunciado por múltiples organizaciones de derechos humanos, por activistas, y por su propia familia, quienes alertaron sobre condiciones inhumanas, falta de atención médica y violaciones sistemáticas a sus derechos como prisionero.
A pesar de figurar en múltiples listas de presos políticos, nunca fue incluido en los procesos de excarcelaciones del régimen. A pesar de la larga estancia que pasó en prisión, Borges fantasea con la posibilidad de un régimen racional, que componga las fallas de su sistema.
“Ojalá que escucharan a la población cubana, al pueblo de Cuba. Ojalá entendieran que es preciso dialogar con los que piensan diferente dentro y fuera de Cuba (…) Te voy a ser sincero, lo veo un poco difícil”, concluyó su conversación con el citado medio.
Today, April 24, 2025, at 1:20 pm, Ernesto Borges Pérez, a political prisoner for 27 years and a Catholic layperson, has been released. This day marks a victory for the resistance and freedom in Cuba.
We make an urgent call: Let us not rest until all political prisoners are free! pic.twitter.com/K7gZW0WcAS— Cubanos en Washington DC 🇨🇺🇺🇸 (@CubWashingtonDC) April 24, 2025
