En medio de una severa crisis económica marcada por la escasez de alimentos, productores agrícolas de Camagüey denunciaron que están perdiendo toneladas de mangos debido a la ineficiencia de la empresa estatal Acopio y a la imposibilidad de vender los frutos libremente.
De acuerdo con el portal web Adelante, a menos de cinco kilómetros del reparto Julio Antonio Mella, en Camagüey, se echó a perder la mayor parte de los mangos cosechados en las fincas 12 y 17 de la Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC) 1.º. de enero, pues las lluvias de mayo aceleraron la maduración y la empresa estatal Acopio no fue a recogerlos.
Agustín Garrido Ramos, trabajador de la finca 17, afirmó que tras recoger los “mangototes” súper Haiden quedó a la espera de que la base productiva o Acopio buscaran el producto, pero ante la excesiva demora perdió la mayor parte de la cosecha.
El campesino realizó diversas gestiones, pero la única respuesta que recibió fue que sacara los mangos que se estaban pudriendo, los colocara en cajas y los fotografiara para mostrar a Acopio como evidencia.
No fue hasta el pasado lunes 7 de junio, diez días después de las llamadas de Garrido, cuando la empresa estatal recogió la mercancía ya podrida, pues en ese periodo se descompusieron 320 cajas, equivalente a 128 quintales, para un total de 12.800 libras de mangos, lo que equivale a 5.805 kilos.
“Nosotros hubiéramos llenado el carretón de caballo o el de los bueyes para salir a venderlo, aunque fuera en los repartos cercanos, pero no tenemos la autorización de la UBPC”, aseguró Ricardo Montaña Téllez, otro cooperativista, que atiende la finca No. 12, colindante con la de Garrido.
De las 165 cajas que cosechó Montaña, solo pudieron aprovecharse 35, pues resto también se pudrió.
“Desistí de tumbarlos, pues para tenerlo aquí apilado y ver como se pudren, los dejo en el mangal. Duele ver como se pierde la comida y que uno no pueda ni regalarla”, dijo.
Aunque los cooperativistas podrían llegar a cobrar sus salarios, la pérdida de más de 82.650 libras de mangos resulta inaceptable en un país donde la población sufre notables carencias alimenticias.
