El pasado 18 de noviembre se dio a conocer la triste noticia de la muerte de la destacada actriz cubana Broselinada Hernández a los 56 años de edad.
Las personas allegadas a ‘Brose’ señalaron que en la noche del 17 de noviembre, la actriz salió de casa y dijo antes de cerrar la puerta que iba a buscar unos cigarrillos, sin embargo, nunca regresó.
Su colega, Susana Pérez, compartió en sus redes sociales unas emotivas palabras para despedirla y señaló que había notando que Broselianda no estaba del todo bien
Por su importancia, la redacción de Asere Noticias reproduce de manera íntegra las palabras de Susana Pérez:
Broselianda y yo cruzamos el Orinoco en una patana, recorrimos miles de kilómetros por polvorientas carreteras y nos hospedamos en tugurios, siempre con la broma de que a nuestro regreso a La Habana diríamos que nos habíamos quedado en los Hilton de Venezuela.
Estuvimos juntas en casa de Napoleón, no Bonaparte, si no un amigo de su madre y descubrimos que en casa de los ricos se come muy poco y mal y salimos de allí directo a llenarnos con un buen almuerzo.
Me tuvo una noche en vela porque desapareció con un titiritero que acabábamos de conocer y regresó en la mañana feliz e inconsciente. En un momento disputamos un amor, ella ganó, pero eso no nos hizo enemigas.
Nuestros encuentros siempre fueron alegres, amistosos y respetuosos. Yo la admiro mucho como actriz, su voz, su temperamento, toda ella.
Aunque hace más de un año que no la veía si fui notando en las cosas que publicaba que no estaba del todo bien. ¿Se pudo evitar? No sé.
¿Ella era consciente de su depresión? ¿Eran partícipes sus familiares? Tampoco lo sé, lo que si sé es que murió como ella quiso y como hacía todas las cosas, como una escena, quizás cantando Alfonsina y el mar, pero lo que sí no quiso saber es el vacío que ha dejado en los escenarios.
¡¡¡Adiós Brose!!! Que el dolor te sea leve.
