Sacerdotes de Ifá y miembros de la comunidad yoruba cubana se dieron cita el pasado sábado, 25 de enero, para limpiar algunas de las playas de Oeste de La Habana.
El accionar de los practicantes de la religión afrocubana sucede a raíz de la petición de Lorena González Causo, medioambientalista y activista cubana en contra del maltrato animal, quien hizo un llamado de atención en redes sociales para acabar con los sacrificios de disímiles especies a las orillas de las playas.
https://www.facebook.com/lorena.gonzalezcasuso/posts/1027276970954648
Los religiosos, por tanto, decidieron sumarse a la cruzada que el último sábado de cada mes emprenden un grupo de cubanos para higienizar algunos entornos de la capital cubana, como las zonas costeras de La Concha, 110 y 1ra. La campaña es conocido como el “Trash Challenge”.
Imágenes del hecho fueron compartidas en redes sociales por la Asociación Cultural Yoruba de Cuba, demostrando así que la relación entre Ifá y la naturaleza es indisoluble.
https://www.facebook.com/permalink.php?story_fbid=1240746732793167&id=959874867547023
La entidad también acompañó las instantáneas con un reflexivo texto, firmado por el el destacado investigador Babalawo Víctor Betancourt, que revela la importancia del ecosistema en el imaginario yoruba.
“El lenguaje de Ifá instaura una intercomunicación entre el hombre y la naturaleza, para fundar un intercambio entre los recursos que éste necesita de las fuentes naturales para su propia existencia y la fuerza inhibidora que debe entregarse a cambio, para que se mantenga latente la dinámica de la vida y el equilibrio ecológico”, reza la nota.
En su artículo, Betancourt hizo mención de los distintos tipos de ofrendas y los lugares donde son colocadas. Así como, el tratamiento que se le debe dar a los residuos no biodegradables.
“Aprovecho este momento oportuno, para hacer un llamado a las autoridades competentes y a todos los religiosos de las tradiciones de origen africano, a que mantengan y proliferen la reforestación en todas las zonas urbana, siempre y cuando el diseño, distribución poblacional y la estructura arquitectónica de esos lugares lo permitan”.
“Es bueno que quede claro que, las ofrendas tiradas en zonas urbanas no cumplen con los postulados mágicos religiosos ancestrales. Al contrario, estamos atentando contra la sanidad pública y no estamos contribuyendo a fortalecer los espíritus elementales”, concluyó.
https://www.facebook.com/permalink.php?story_fbid=1240768299457677&id=959874867547023
