La querida y talentosa actriz cubana, Yuliet Cruz Delgado, y su esposo Leoni Torres regalaron a sus seguidores en redes sociales unas hermosas imágenes, con las que expresaron sus deseos de paz y unión entre todos los cubanos.
En estos días convulsos que afectan la sociedad cubana, la querida pareja de artistas se fusionó en un potente abrazo familiar junto a sus pequeños hijos, Samuel y Sebastián, demostrando que en momentos como estos se necesita la unión, el entendimiento, el amor y la libertad.
La familia posó vestidos de blanco, y fue el reflejo más vivo del dolor y el lamento de miles de cubanos que viven tanto dentro como fuera del país.
Recientemente, los artistas se pronunciaron a través de un vivo en Instagram, donde condenaron los métodos represivos empleados por el gobierno de la Isla ante el pedido de “libertad” y “fin de la dictadura” que demandaba la multitud en las calles.
“Como madre cubana expresar mi total desacuerdo a la violencia desatada por parte del gobierno de Cuba contra el pueblo. No tiene justificación, no hay justificación”, sentenció Yuliet en el material.
“Se acaba de romper algo que no se va a volver a componer. Y no saben cuánto me duele. No saben cuánto me ha roto el corazón que haya pasado esto”, añade.
“No se puede reprimir a un pueblo que está pidiendo que lo escuchen. No es la manera de hacerlo. Hay que oír al pueblo. Tienen su total y legítimo derecho de decirte lo que no quieren”, argumentó.
Precisamente, el pasado domingo 11 de julio, cuando el pueblo se manifestó en las calles con claras exigencias, la actriz advirtió a los esbirros del régimen que no usaran la violencia contra los ciudadanos.
“El pueblo en la calle. Hay que escucharlo. No a la violencia. No vayan a reprimir al pueblo. Hay que escucharlo. No toquen al pueblo”, escribió.
Hace poco más de una semana, miles de cubanos de varias provincias del país salieron a las calles a exigir libertad, alimentos, medicamentos y atención médica adecuada. La primera manifestación se reportó en San Antonio de los Baños, Artemisa, y en pocas horas se extendieron a lo largo del territorio. Todas espontáneas y compartiendo el mismo deseo de libertad.
