Bienestar Animal Cuba (BAC) emitió el miércoles una alerta a raíz de las medidas de “saneamiento” impulsadas por el Gobierno, por el brote de rabia que acabó con la vida de tres personas en Mayarí, Holguín, y dejó a dos hospitalizados.
De acuerdo con el grupo de apoyo y protección animal, “saneamiento” no significa otra cosa que recoger animales y sacrificarlos a las 72 horas, en caso de no ser reclamados por ningún ciudadano del área.
“Lamentablemente, no hay un movimiento protector en Mayarí, solo dos activistas han sido identificadas y tienen muchos animales. Por tanto, no hay quien saque los perros a las 72 horas, especialmente porque no hay transporte de Holguín a Mayarí para apoyar”, indicó la organización sin fines de lucro en sus redes sociales.
Lo ético y humano
También se notificó que, en estos momentos, diferentes representantes se encuentran conciliando con la Dirección Municipal de Higiene para que, una vez culminado el tiempo inicial, no sacrifiquen a los animales. La idea es que los dejen en observación, al menos, por diez días.
“Si al cabo de los diez días no presentan signos de rabia —es lo establecido en el Programa Nacional contra la Rabia para decidir si hay o no peligro de contagio— que sean vacunados y se espere para que levanten anticuerpos en sangre antes de soltarlos”.
“Eso sería lo correcto: lo ético y humano. De esa forma, ni se viola el programa de lucha contra la rabia, ni se sacrifican con estricnina animales sin rabia”, concluyó la entidad.
Tres víctimas mortales
A mediados de mayo, Eduardo Mejías Sayas, de 53 años, su esposa Eldris Sánchez Mustelier y su cuñado Fernando, fallecieron en el Hospital General Docente “Vladímir Ilich Lenin” tras estar, al menos, dos semanas ingresado en estado grave.
A la par, permanecieron ingresados los dos hijos adolescentes del matrimonio.
Todo parece indicar, que la familia adoptó un gato callejero enfermo. Intentaron medicar al felino, pero este terminó arañando y mordiendo a sus respectivos dueños, quienes finalmente lo terminaron abandonando.
La rabia, una enfermedad viral de tipo zoonótica, es considerada altamente aguda e infecciosa. A la vez, es provocada por un Rhabdoviridae —hallado en la saliva y las secreciones de los mamíferos— que ataca el sistema nervioso central, causando una encefalitis. Sin embargo, desde el 2008 no se registraba ningún deceso en la Isla por esta causa en específico.
