Tras tres años de pandemia, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, firmó una resolución bipartidista el lunes 10 de abril para poner fin a la emergencia nacional que se implementó en el país a causa del COVID-19.
Es importante recordar que, mientras estuvo activa, la medida permitió al Gobierno norteamericano tomar decisiones drásticas para enfrentar la pandemia, con las más conocidas afectando el sistema de salud, la economía y la convivencia social.
Mientras algunas de estas políticas lograron ser eliminadas de manera paulatina, como el uso obligatorio de mascarillas, otras todavía se encuentran en proceso de ser eliminadas, algo que será más rápido con la firma de la legislación.
Mediante un comunicado, la Casa Blanca indicó que Biden firmó el documento a puertas cerradas, esto luego de haberse opuesto a este de manera pública.
De acuerdo con la agencia de noticias AP, representantes demócratas votaron en contra de la medida en febrero, luego de que esta fuera aprobada en la Cámara Baja por mayoría republicana, mientras que, en marzo, se aprobó en el Senado con 68 votos a favor y 23 en contra. Fue hasta este último resultado que el presidente aceptó firmarla.
La administración demócrata comenzó con los preparativos para regresar a la “normalidad”, asegurándose de que las agencias gubernamentales restablecieran los procedimientos que tenían antes de la pandemia.
De acuerdo con el Gobierno estadounidense, en mayo se explicarán los cambios que se aplicaron al programa de moratoria hipotecaria por COVID-19 del Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano.
A su vez, el Departamento de Asuntos de Veteranos indicó que volverá a requerir visitas presenciales a casa para poder determinar si la persona es elegible para recibir cuidados asistidos.
De momento, las restricciones migratorias permanecerán activas, aunque puede que lleguen a su fin el próximo 11 de mayo, pues es la fecha en la que se tiene contemplado el fin de la aplicación del denominado Título 42, el cual permite la expulsión inmediata de migrantes en busca de asilo político.
De acuerdo con cifras oficiales de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EEUU (CDC, por sus siglas en inglés), el país registró más de 104 millones de contagios, así como 1.127.104 fallecidos a causa de la enfermedad.
