Kristina Rosales, portavoz del Departamento de Estado de la administración de Joe Biden, confirmó a la prensa que los vuelos de deportación entre Estados Unidos y Cuba, los cuales se reanudaron el mes pasado, se duplicarán en los próximos meses.
Según la funcionaria, esto afectará a todas las personas de la Isla que se presenten a EEUU de manera irregular, ya sea vía terrestre, aérea o marítima. De igual manera, recalcó que los balseros cubanos que sean interceptados en el mar serán devueltos a la Mayor de las Antillas de manera inmediata.
“Las personas que no están utilizando las vías accesibles, las que se están presentando de manera terrestre, marítima, o que son detenidos por la Guardia Costera en el mar, o se presentan de forma irregular en el aeropuerto; esas personas serán repatriadas”, indicó a Telemundo.
Rosales recordó que la administración de Biden ha puesto varias alternativas legales a disposición de los migrantes, como el parole humanitario, que ofrece 30.000 visas mensuales a personas de Cuba, Venezuela, Nicaragua y Haití, que cuenten con patrocinadores en el territorio.
“Si usted tiene un familiar que lo reclama o clasifica para el parole humanitario, infórmese del procedimiento, de las opciones que tienen. No se informe con el contrabandista que le promete llegar a EEUU, sino por las vías oficiales”, añadió la funcionaria.
El incremento en el número de vuelos de deportación se debe a que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) se está preparando para un incremento en el número de migrantes que intentan ingresar al país de manera ilegal.
Este incremento se pronostica debido a que el denominado Título 42, el cual permite la expulsión inmediata de los indocumentados por motivos de COVID-19, terminará el próximo 11 de mayo.
Ante la situación, la administración de Biden adoptó la estrategia de reforzar los controles fronterizos, así como la vigilancia en los 3.000 kilómetros de frontera que comparte con México.
En las últimas semanas, se supo que el gobierno de EEUU ha movilizado unas 1.500 tropas del ejército hacia la frontera, las cuales apoyarán a la Patrulla Fronteriza de EEUU (USBP) hasta que esta cuente con el número suficiente de miembros para controlar el flujo irregular de migrantes hacia el territorio norteamericano.
