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Más de 7.000 personas en La Habana continúan sin agua potable tras el huracán Ian

A más de una semana del paso del huracán Ian por el occidente de Cuba, alrededor de 7.500 personas permanecen sin servicio de agua potable en La Habana.

Durante una transmisión del programa Mesa Redonda, el gobernador de la capital, Reinaldo García Zapata, reveló que dos fuentes de abasto de agua en el municipio de Boyeros continuaban sin trabajar.

De igual manera, el funcionario aseguró que este miércoles existía la posibilidad de abastecer de agua potable a toda la población de La Habana por bombeo.

Señaló que se cuenta con 46 pipas para llevar el líquido a zonas con déficit, número que parece ser insuficiente para un territorio que alberga a más de dos millones de personas.

El gobernador de la capital cubana aseguró que la principal prioridad de las autoridades fueron los hospitales y centros de evacuación.

En cuanto a las líneas de electricidad, el funcionario señaló que no solo se destruyó la infraestructura con el paso del huracán, sino que también falló el sistema eléctrico nacional tras una avería ocurrida entre Matanzas y La Habana, por lo que la cantidad y duración de los apagones se extendieron.

Durante la transmisión del programa, realizada este martes 4 de octubre, más de 1.800 personas en la capital continuaban sin servicio de electricidad, esto pese a los esfuerzos hechos por las brigadas que se trasladaron desde otras provincias a La Habana.

Estos han logrado restaurar 38 líneas de 110 kV, 32 de 33 kV, así como 285 circuitos primarios, 239 secundarios, 131 postes eléctricos y 58 transformadores, aunque estas labores han llegado con el precio de dos vidas.

La falta de electricidad ha sido una de las principales quejas de la población en los últimos días, pues el fenómeno meteorológico provocó daños a la red de distribución, lo que dejó a las tres regiones de la Isla (occidental, central y oriental) sin energía.

El proceso de restauración ha sido lento, lo que generó molestia entre los residentes, muchos de los cuales salieron a las calles a exigir un mejor trabajo por parte de las autoridades responsables. Estas manifestaciones han resultado en una ola de represión, en la que al menos 20 personas, entre ellas un niño de 12 años, fueron detenidas.

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