La opositora cubana Saily González, una de las principales organizadoras de la Marcha Cívica por el Cambio, denunció un acto de repudio que se llevó a cabo frente a su vivienda el día de hoy, a unas pocas horas de la protesta pacífica convocada para este lunes 15 de noviembre.
Mediante un video compartido en sus redes sociales, la activista señaló que desde las 5:30 a.m. un grupo de simpatizantes de la Revolución se estacionaron a las afueras de su hogar, para gritar consignas comunistas y sostener carteles a favor del castrismo.
González indicó que reconoce a unas tres personas de entre la multitud, pero el resto son desconocidos, por lo que está segura de que no son vecinos de la zona, sino personas que están cumpliendo con un acto organizado por el régimen.
Los comunistas no se molestaron en ocultar la naturaleza represiva del acto de repudio, pues han gritado que están allí para impedir que la activista salga a las calles este 15 de noviembre a marchar.
El acto de repudio fue denunciado también por el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH), el cual rechazó el comportamiento de los involucrados.
“En estos momentos está ocurriendo un acto de repudio frente a la casa de Saily González. Lo condenamos en los términos más contundentes”, redactó el OCDH mientras compartía el video de la activista.
URGENTE: En estos momentos está ocurriendo un acto de repudio frente a la casa de @SailydeAmarillo Lo condenamos en los términos más contundentes. @mbachelet @JosepBorrellF @Almagro_OEA2015
👉https://t.co/pIeuKtJxMa#15NovCuba— Observatorio Cubano de Derechos Humanos (@observacuba) November 15, 2021
Este no ha sido el único acto de repudio relacionado con la marcha del 15N, pues desde el día de ayer opositores como Yunior García, líder del grupo Archipiélago, amaneció sitiado por la Seguridad del Estado y varios simpatizantes del castrismo, los cuales impidieron que saliera de su hogar para marchar en solitario.
Humberto López, vocero del régimen, acudió al lugar para entrevistar a aquellos que se encontraban a las afueras de la casa del opositor, los cuales aseguraron que nadie los había enviado y todos habían llegado al lugar por su propia voluntad.
Estas declaraciones de patriotismo perdieron fuerza cuando usuarios en redes sociales denunciaron que los participantes fueron trasladados al lugar en dos guaguas, las cuales pudieron acercarse a la calle pese a que las autoridades bloquearon el paso a todos los que intentaban llegar al edificio.
