Una anciana cubana residente en Florida denunció haber sido víctima de un grave delito, pues dos personas robaron su identidad para comprar tres automóviles a su nombre, dejándola con una deuda de más de 108.000 dólares.
De acuerdo con el medio local América TeVé, la anciana fue identificada como Julia Sánchez, de 73 años de edad, quien vive en La Pequeña Habana.
Uno de los responsables del crimen fue Christopher Landy Mora, de 24 años de edad, dueño de una concesionaria de autos en la ciudad de Hialeah.
Landy Mora trabajó en conjunto con Damián Iglesia-Martínez, de 26 años y de origen cubano, quien actuaba como gerente de finanzas del concesionario Realeza Motors, ubicado en la 5612 E. Eighth Avenue.
Estas personas habrían utilizado la identidad de la anciana para comprar un Honda Accord 2020, un Ford Mustang 2016 y un Chevrolet Malibu 2018 a su nombre, usando una licencia de conducir vencida de la víctima para hacerlo.
Según medios locales, Damián Iglesia-Martínez habría fingido ser sobrino de la anciana para realizar la compra.
Por su parte, Landy Mora firmó documentos que aseguraban que Sánchez trabajaba en una compañía de celulares y que tenía un ingreso mensual de 8.000, algo que es falso, pues la anciana percibe poco más de 800 dólares al mes.
“Me empezó a llegar correspondencia de los bancos, de las aseguradoras de los carros y entonces me di cuenta de algo pasaba. Son bandoleros porque compraron tres carros a nombre mío, me cambiaron la dirección para otro lugar”, declaró la anciana.
Los sujetos realizaron las compras en noviembre, y fueron arrestados en diciembre de 2022, luego de que se iniciara una investigación.
Este operativo se llevó a cabo porque la compañía de seguros National General Insurance habló con la anciana tras un accidente que involucró al Honda Accord 2020. En aquella ocasión, la mujer aseguró no saber nada de esa compra, pese a que el automóvil estaba a su nombre, por lo que contactaron a la policía.
El reporte señala que, luego del accidente, los sujetos dejaron el vehículo parqueado afuera de la vivienda de la anciana, para aparentar que había sido ella la que tuvo el accidente.
