Las autoridades del Zoológico Nacional de La Habana informaron que decidieron no poner reguetón con “letras obscenas y de mal gusto” a los visitantes del lugar, tras la denuncia de una madre cubana que visitó las instalaciones con su familia, reseña diario oficialista Juventud Rebelde.
Según cuenta la sección “Acuse de recibo” del mencionado diario, María Reyes Quintana, residente en el municipio Arroyo Naranjo criticó -el pasado 14 de octubre- que durante las 4 horas que duró su visita los altoparlantes de la instalación emitieron a todo volumen “reguetón de muy mal gusto”.
“¿No es un parque fundamentalmente para niños? Siempre condenamos que a los niños les pongan esa música, y hacen lo que les da la gana. ¿Quién debe velar por que se cumpla lo establecido?”, denunció Reyes Quintana.
La mujer también observó que en las instalaciones vendían -casi de forma exclusiva- sólo cervezas, por lo que contó:
“Aquello parecía un centro nocturno y ni siquiera un refresco. La malta se acabó a la hora de abrir el parque. Sabemos la situación que afrontamos con los suministros, pero hay que velar por la seguridad de los niños. Las bebidas alcohólicas no pueden ser la prioridad en un parque infantil, sin contar el trato de algunos dependientes, que deja mucho que desear”.
Menos reguetón y más música cubana
Tras estas duras pero certeras críticas, Carlos Tabares Correa, director comercial del Parque Zoológico Nacional, visitó a Rosa María en su domicilio junto al Jefe de Gastronomía de dicha institución.
Y según informa Juventud Rebelde, la conversación fue grabada para darla a conocer a todo el personal administrativo de las unidades gastronómicas del centro, convocadas a reunión de análisis de la queja hecha.
Tras el encuentro, el zoo adoptó medidas para su cumplimiento inmediato. Entre ellas, que “la música para el disfrute del público debe ser variada, sin censurar el reguetón como género musical, pero sí el portador de letras obscenas y de muy mal gusto. Debe alternarse la canción infantil con baladas y música cubana de elevada calidad”.
