Díaz-Canel reconoce que hambre y apagones en Cuba no tienen solución inmediata: pide más sacrificios
Insistió en que lo único viable es exigir más sacrificios a la población, mientras el gobierno asegura que hay presuntos resultados positivos en todo el país

El designado presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, reconoció el miércoles 21 de mayo en el municipio de Esmeralda que los problemas de hambre y apagones que atraviesa la Isla no tendrán una solución inmediata.
Ante esta realidad, insistió en que lo único viable es exigir más sacrificios a la población, mientras el gobierno asegura que hay presuntos resultados positivos en todo el país.
Durante un recorrido oficial en Camagüey, Díaz-Canel admitió que “aun con apagones, dificultades en la canasta familiar y los medicamentos, asuntos que no tendrán una solución inmediata, hay una obra y resultados positivos en cada municipio”.
Sin embargo, estas palabras contrastan con las constantes denuncias hechas en redes sociales por el pueblo, mismas que evidencian la profunda crisis económica y social que afecta al país.
En la visita, al mandatario se le informó que el arrocero 17 de Mayo, una instalación clave para la Empresa Agroindustrial de Granos en la provincia, tiene una capacidad de unas 30 toneladas de arroz diarias.
Esta producción abastece presuntamente a varios municipios del norte de Camagüey, sin embargo, con una demanda anual de más de 8.500 toneladas para una población de 142.500 habitantes, la producción nacional sigue sin alcanzar para cubrir las necesidades básicas del pueblo.
Datos oficiales del Anuario Estadístico de Cuba 2023 confirman la gravedad del desabastecimiento: la producción de carne de cerdo cayó un 93,2% y la de arroz un 59,1% en solo un año. Otros productos esenciales como huevos, leche, frijoles y hortalizas también sufren fuertes disminuciones.
Las causas incluyen escasez de insumos agrícolas, maquinaria obsoleta, falta de fertilizantes y problemas en la alimentación del ganado.
Cuba depende en un 80% de las importaciones para satisfacer su demanda alimentaria, situación que eleva la inflación y encarece los productos básicos.
Frente a esta crisis, el gobierno ha solicitado ayuda al Programa Mundial de Alimentos de la ONU para entregar leche en polvo a niños menores de siete años, evidencia clara de la crisis humanitaria que vive la Isla.
Por su parte, la crisis energética persiste. El Estado del Sistema Eléctrico Nacional reportó un déficit de hasta 1.770 MW en horas pico para el 20 de mayo, lo que pronosticaba apagones prolongados en más de la mitad del país, mientras que este jueves se calcula un déficit de 1.500 MW.
En redes sociales, muchos cubanos expresan su frustración, asegurando que estas peticiones son solo burlas en contra del pueblo, el único que tiene que cumplir con sacrificios mientras los miembros del régimen se dan lujos que el cubano de a pie solo puede soñar.