Durante la asunción de Alberto Fernández, el momento más esperado de la jornada era el encuentro entre Mauricio Macri y Cristina Fernández de Kirchner, su antecesora en la Casa Rosada y ahora vicepresidenta de la Nación argentina.
La dupla vencedora en las elecciones del pasado 27 de octubre esperaban junto a varios funcionarios por Macri para proceder a la jura presidencial.
Cuando el expresidente de la Argentina cruzó el cortinado que lo separaba del recinto de la Cámara de Diputados, la ahora vicepresidenta hizo un peculiar gesto que llamó la atención de todos los presentes y que generó diversas interpretaciones.
Muchos usuarios expresaron que Cristina le estaba exigiendo al presidente saliente que “pusiera la guita”, refiriéndose a que repusiera toda el dinero que le había robado al país en sus cuatro años de mandato, mientras que otros interpretaron que solo fue una señal para pedirle a un colaborador que le llevase un abanico, ya que después se le ve usándolo durante el discurso.
La verdad solo la sabe la actual Vicepresidenta, lo que si se logró evidenciar fue el frío saludo entre los dos. En todo el trascurso de la jornada, los gestos y la actitud de Cristina dejaban al descubierto su abierto rechazo a la persona que gobernó al país durante el 2015 y 2019.
