Las autoridades castristas confirmaron de manera oficial el reinicio de los vuelos de repatriación desde los Estados Unidos, sin embargo, al igual que en meses anteriores, estas no han dado una fecha exacta para ello.
De acuerdo con la subdirectora general para EEUU del Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex), Johana Tablada, las deportaciones de cubanos hacia la Isla comenzarán “próximamente”.
“Se mantienen las devoluciones de migrantes cubanos interceptados en el mar, y se van a reanudar, muy próximamente, según tengo entendido, vuelos de devolución de los llamados inadmisibles, personas que Estados Unidos no acepta en su territorio y que se pactó que fueran devueltas a Cuba como parte de los acuerdos bilaterales”, dijo la funcionaria al medio OnCuba.
También dijo que es posible que haya más conversaciones entre representantes de ambos gobiernos, como las que hubo el mes pasado y en las que se tocaron temas migratorios como el de la reanudación de los vuelos y las actividades consulares en La Habana.
“Ese es el punto en el que estamos, y vamos a seguir trabajando. No tengo dudas de que va a haber nuevas rondas y nuevos espacios de conversación sobre los temas”.
Tablada reconoció que las autoridades norteamericanas lograron cumplir con su meta de entregar 20.000 visas de inmigrantes este año, por lo que solo queda pendiente el asunto de las visas de no migrantes, las cuales deben ser solicitadas en un tercer país.
Es importante recordar que el Gobierno de EEUU estaba a nada de reanudar los vuelos de deportación hacia la Isla, pero el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) filtró por error la información de miles de migrantes que solicitaron asilo en el país, incluyendo varios cubanos que iban a ser devueltos.
Entre la información que estuvo expuesta por varias horas en línea, se encontraban las entrevistas de miedo creíble dadas por los solicitantes, en las cuales aseguraban que estos eran víctimas de persecución política en la Mayor de las Antillas.
Los solicitantes también afirmaron que no podían volver, pues serían sujetos a torturas o encarcelados por el Gobierno castrista.
Ante el temor de posibles represalias por sus declaraciones en dichas entrevistas, el Gobierno de EEUU decidió suspender momentáneamente la devolución de los cubanos, considerando incluso el darles una segunda oportunidad para pedir asilo.
