El cruce de cubanos por el Río Bravo, en la frontera de México con Estados Unidos, continúa, y con él, siguen siendo captadas imágenes de personas arriesgando sus vidas por la oportunidad de una mejor vida que la que podían esperar en la Isla.
En esta ocasión se grabó como una migrante cubana se enfrentó al cuerpo de agua en la ciudad de Piedras Negras, en el estado de Coahuila, el cual se encuentra al otro lado de Texas.
La mujer, originaria de la provincia de Matanzas, recibió la ayuda de un joven mexicano que se encontraba viendo el momento en el que intentó cruzar por su propia cuenta.
En las imágenes que circulan en redes sociales se puede observar cómo ambos entrar nerviosos al río, no sin antes mandarle saludos a su familia en la Isla, la cual asegura debe sentirse preocupada por ella.
El hombre grabando todo recalcó que la travesía que la mujer atravesó era muy peligrosa, aclarando que el joven que la ayudó no estaba cobrando nada por asistir.
Según el video, la mujer venía acompañada por otras dos personas, las cuales ya habían cruzado el río y se encontraban con las autoridades migratorias del lado estadounidense, por lo que la matancera se sintió sola e impulsada para seguir.
El camarógrafo dijo que él no alentaba a nadie a entrar de manera ilegal a EEUU, sin embargo, comprendía que había personas que no tenían otra opción, por lo que lo único que podía hacer era aconsejar que estas buscaran las partes menos profundas del río.
“Puede que el muchacho esté cometiendo algún delito, pero es más delito verlos morir en el río y no hacer nada”, añadió.
El video también muestra que la mujer ya estaba siendo esperada por un agente de migración de EEUU al otro lado del cuerpo de agua.
La grabación concluye cuando la mujer logra cruzar al otro lado, donde se presume que el oficial estadounidense la puso bajo custodia.
Mientras este incidente terminó con la mujer a salvo, hay decenas de historias más que acaban en tragedia, como la del joven Guillermo Alan Matos, de 33 años de edad, quien la semana pasada perdió a su esposa y a su hijo de cuatro años mientras intentaban llegar a EEUU.
El hombre dijo que la corriente era demasiado fuerte, por lo que el agua se llevó a ambos, mientras este no pudo hacer nada más que intentar regresar al lado mexicano del río.
Matos dijo que su hijo tenía dos tumores, por lo que su familia se encontraba viajando a EEUU para poder operarlo.
