El gobernador de Nueva York, Andrew Mark Cuomo, cedió a la presión ciudadana y ordenó el pasado viernes una cuarentena estatal obligatoria e indefinida. La medida, vigente a partir del próximo domingo, tiene como objetivo frenar la pandemia de coronavirus (Covid-19).
De acuerdo con el demócrata, tras la fecha señalada el metro seguirá operativo pero con menos frecuencia.
Las restricciones empezarán a las 8:00 p.m (hora local) del 22 de marzo e incluyen el cierre de todos los negocios no esenciales en el estado. Solo permanecerán abiertas las tiendas de comestibles, farmacias y otras operaciones importantes como los medio de comunicación.
Este sábado, ya deben cerrar —por ejemplo— peluquerías y demás centros de belleza.
A la par, desde la noche del domingo se prohíben todas las actividades externas grupales, dígase juegos de baloncesto al aire libre y otros deportes de equipo. Y se requiere que todos los empleados “no esenciales” del gobierno y del sector privado trabajen desde casa.
“Tenemos que hacerlo, debemos ser serios”, dijo Cuomo en una reciente rueda de prensa llevada a cabo en el capitolio estatal. “Todos tienen libertad personal y siempre protegeré eso. Pero todos también tienen una responsabilidad con todos los demás”.
El funcionario también alertó que todos aquellos que no cumplan con las medidas serán multados.
Actualmente, el estado de Nueva York cuenta con más de 7 mil casos. De estos, cerca de 4.400 se encuentran solo en la ciudad de Nueva York.
